
CONSULTAS
CONSULTAS DE COMUNICACIÓN CON ANIMALES
¿De qué se habla con los animales en una consulta?
Una consulta de comunicación intuitiva es un espacio de diálogo íntimo junto a nuestro animal de compañía para que éste pueda expresar su perspectiva sobre las distintas situaciones que vive y ha vivido a lo largo de su existencia. En algunos casos, sobre todo cuando adoptamos o rescatamos animalitos adultos, estas experiencias pueden dejar profundos dolores y tristezas a causa de la crueldad y la apatía con que fueron tratados, dejando en ellos temores que a veces se encienden en ellos, por ejemplo, al estar en contacto visual con personas con características físicas específicas. El poder expresar todo lo que le ha generado lo que ha sentido y lo que está sintiendo, resulta muy sanador para ellos, como lo resulta para nosotros cuando verbalizamos nuestras emociones y sentimos ese “descanso” o cómo se liberan los “nudos” que se nos hacen en la garganta una vez se expresa.
Este espacio también es para que conversemos sobre las distintas dudas, molestias, temores o dolores que nos puedan surgir a las personas durante nuestra convivencia junto a nuestro animal de compañía. Por ejemplo, indagar sobre el gusto por su comida, si le gustan ciertas actividades, qué opina de ellas, qué opinan de sus hermanos animalitos, cómo es la convivencia con ellos, qué les gustaría cambiar en su vida, qué les quiere decir cuando hace determinado comportamiento, sólo por mencionar las más recurrentes.Además, podemos preguntarle sobre actividades específicas que realices junto a tu animal de compañía tales como agillity, canicross, terapias e intervenciones asistidas, equitación entre otras, para conocer su perspectiva sobre éstas y poder ofrecerle alternativas para mejorar el desempeño y bienestar al momento de realizarlas.
Algunas veces la situación que estamos viviendo junto a nuestros animales pueden generarnos preguntas y dudas ligadas a comportamientos atípicos que aparecieron “de repente” sin ninguna explicación aparente: enfermedades que estén padeciendo, la llegada de nuevos miembros a la familia, el tránsito a la muerte por procesos terminales o conversar sobre su paso por la vida física cuando ya han desencarnado para así reconocer y liberar en nosotros, todas las emociones que pueden estar dificultando estar en paz con la partida de nuestro peludito.

Si bien nosotros, como las personas responsables de nuestros animales tenemos claros los temas que queremos dialogar junto a ellos, hay veces en que ellos también tienen claro de lo que quieren hablar y sus prioridades son distintas a las nuestras. Desde su profundo amor y compasión, ellos ven nuestro bienestar y procesos de alma como una prioridad en sus vidas, por lo que resulta frecuente que al estar conversando, nos hablen sobre personas de la familia y distintas situaciones que les pueden estar generando malestar. También es común que ellos nos muestren alternativas a estas situaciones difíciles o retadoras, pues ellos nos conocen tan profundamente que, además de sorprendernos con sus respuestas, también nos permiten ver partes nuestras que tal vez no teníamos presentes, para así ser más conscientes de cómo podemos transitarlas.
CONSULTAS DE EMERGENCIA
Estas consultas están pensadas para casos donde la vida del animal está en riesgo o está sufriendo a causa de una complicación médica y se hace necesario realizar la comunicación para conocer su opinión sobre las desiciones a tomar con respecto a su situación, incluida su opinión sobre la eutanasia. Es por esto que estas consultas se realizan en un plazo máximo de 48h desde que se solicita.
CONSULTA DE BÚSQUEDA DE ANIMALES PERDIDOS
En los casos de animales perdidos, nos enfocamos en saber cómo se sienten tanto el animalito como su familia, para ayudar a drenar toda la energía de tensión, angustia y miedo que pueda haber y facilitar el proceso para que el animalito pueda volver o se deje ver de personas cercanas. En algunos casos, puede darnos pistas sobre su ubicación geográfica a partir de lo que ven, escuchan, huelen y sienten, lo que puede ser información útil para su búsqueda. Otro aspecto que trabajamos en las consultas de búsqueda, es el porqué ocurrió esto y qué puede haber detrás de esta situación para la familia y el animalito.
Darle comandos intuitivamente a un animalito para que ladre, se mueva o haga algo en particular, es algo que suele resultar inútil, por eso las consultas de búsqueda no aseguran encontrar al animalito ni que regrese, pero sí permiten saber cómo está (encarnado o desencarnado), que nos dé pistas de su ubicación y acercarnos a la situación y su desenlace desde una perspectiva más amorosa y equilibrada. La probabilidad de encontrar un animalito o que éste vuelva a casa es del 50/50.
¿Qué esperar de una consulta?
En las consultas de comunicación intuitiva con animales, parte del rol del comunicador es "traducir" la información para la persona responsable del animal, generando un espacio de diálogo entre el humano y su animal para que ambos puedan expresar su perspectiva sobre las distintas situaciones que viven juntos, las dificultades que pueden presentarse a nivel emocional, mental, espiritual y físico, para así buscar soluciones y alternativas que permitan afrontar de la mejor manera la situación.

Las consultas de comunicación intuitiva con animales son complementarias a las consultas médicas veterinarias y a las consultas con especialistas en comportamiento, por lo que no pueden reemplazarlas. En el caso de complementar las consultas médicas, podemos preguntarle a un animalito si siente alguna molestia o dolor a nivel físico y pedirle que, por ejemplo, muestre la pata derecha delantera, sin embargo eso no es suficiente para generar un diagnóstico o determinar un tratamiento.
Durante una consulta de comunicación, sí podemos preguntarle al animal cómo se siente con el trato de su médico y en general con las visitas al veterinario, cómo se siente con respecto a la cirugía que le realizaron o con el procedimiento médico que proponen hacerle y así validar si está de acuerdo con la realización de éste, si considera necesario el procedimiento o por el contrario por su situación particular de edad o diagnóstico médico ya han sido suficientes intervenciones y visitas al médico y preferiría invertir sus últimos días compartiendo con su familia, acompañado de medicamentos que le eviten sentir dolor.
Algo similar ocurre en los casos de consulta por comportamiento, pues este está estrechamente relacionado al proceso de aprendizaje que ha tenido cada animalito y a su carácter. En el caso de los perritos y gatitos, la etapa más importante del proceso de aprendizaje se presenta en el primer año de vida, tiempo en el cual cualquier comportamiento que realicen y sea reforzado en los distintos escenarios a los que se vea expuesto, va a ser el comportamiento que entienda como “normal”. Por ejemplo, si en algún momento mi perrito teniendo entre 9 y 11 meses empezó a reaccionar con gruñidos y ladridos al ver a otros perros más grandes que él, y ante esto mi reacción fue de intentar calmarlo hablándole, alzándolo del piso y con el paso del tiempo sus reacciones fueron más agresivas y más repetitivas, para poder corregir ese comportamiento, será necesario que “desaprenda” ese comportamiento y aprenda uno nuevo más relajado y sin agresividad frente a los perros más grandes que él.
En un caso como este, con una consulta de comunicación intuitiva con animales podríamos preguntarle al perro qué siente en esos momentos, cuál es su perspectiva de esa situación en particular, cuándo y cómo fue que empezó a sentirse así al vivir esa situación, qué consejos tiene el animalito para ayudar al proceso y así poder procesar las emociones y drenar la carga energética que hay en él relacionada con ese comportamiento o situación en particular, para poder a partir de esto favorecer en su familia el tomar consciencia de todas las implicaciones que tiene la situación.
Para desaprender un comportamiento desequilibrado y aprender uno nuevo equilibrado, es necesario realizar ejercicios específicos de manera constante y disciplinada para que den resultados en un periodo de tiempo que puede ser un par de semanas o hasta años según el caso. Es importante tener en cuenta que las personas encargadas de planear y realizar dichas actividades o ejercicios para corregir los comportamientos inadecuados deben ser personas expertas en comportamiento, como los etólogos y educadores caninos.
Al ser conscientes de nuestra propia existencia, todos los animales poseemos el libre albedrío, lo cual nos da la capacidad de decidir qué hacer y cómo reaccionar en determinados contextos. Como mencionaba anteriormente, esta reacción o decisión están ligadas al proceso de aprendizaje y a su “animalidad” particular, por no decir “personalidad”.
Si bien todos los animales no humanos quieren profundamente ser felices y generar el mayor bienestar para su familia y para sí mismos, esto no significa que vaya a hacer algo por la simple razón que otro animal, en este caso el terapeuta, le comunique intuitivamente que tiene que hacer algo en particular o que modifique una conducta. Por ejemplo, la comunicación no conseguirá convencer al animal de compañía que juegue con el disco y no con la pelota porque a sus hermanitos humanos le gusta más el disco.Todas esas son decisiones que los animales tomamos individualmente, guiándonos por nuestros instintos, emociones, sentimientos, conocimientos y razonamiento de acuerdo a las capacidades y contextos en todos los momentos de nuestra vida y a partir de los aprendizajes que hemos tenido históricamente.
¿Cómo se desarrollan las consultas?
Las consultas tienen una duración aproximada de 50 minutos y se realizan a través de la plataforma Zoom. Para un óptimo desarrollo de la sesión es recomendable que estés en un lugar cómodo en el que puedas hablar y escuchar con tranquilidad (los audífonos o parlantes nos pueden ayudar en esto), donde no te vayan a interrumpir y tengas buena conexión a internet. Te invito a tener papel y lápiz, también es posible grabar la sesión en tu computador siempre y cuando tengas la aplicación instalada. Recuerda que los animales son unos de los mejores maestros con los que podemos compartir nuestras vidas y quizá quieras repasar sus mensajes en el futuro.

No hay límites en la cantidad de personas que pueden participar en la consulta, siempre y cuando hagan parte del núcleo familiar y habiten juntos. Es de suma importancia que quienes participen en la consulta lo hagan desde una voluntad amorosa y receptiva, porque el escepticismo o querer probar de manera retadora que la comunicación intuitiva con animales es posible o no, es la manera más sencilla de bloquear la información e impedir que una consulta se dé de manera fluida y amorosa.
Para realizar una consulta de comunicación con un animal de compañía es necesario contar con su nombre, una foto y su ubicación (por ejemplo Bogotá, Colombia), teniendo presente que quien da el permiso y envía la información es la persona directamente responsable del animal (no puede ser su entrenador, veterinario, paseador, etc).
La distancia física es irrelevante para conectar con los animales intuitivamente, incluso si estamos a miles de kilómetros de distancia, la comunicación se da exactamente igual que si estuviéramos juntos físicamente.
La consulta inicia con la presentación de las personas presentes y la validación de los temas o situaciones a tratar. Luego se realiza un primer contacto con el animalito en el que me presento ante él, le cuento quién soy y por qué estamos haciendo la comunicación, para posteriormente preguntarle por su personalidad. Tras esta primera aproximación, intento compartir la información que me llega contigo y todos los presentes para corroborar entre todos que la información que recibo coincida con tu animalito de compañía y, a partir de esa validación, entrar a dialogar sobre los temas puntuales que se quieren abordar durante la consulta.


